Diploma francés: un pasaporte a lo internacional
Bruno de Carvalho realizó un programa de intercambio Francia-Brasil en la École centrale París. Gracias a la beca Eiffel desarrolló un 3er ciclo en la misma institución. Hoy es Director para Albéa Tubes Europe.
¿QUÉ DESTACA USTED DE SUS ESTUDIOS EN FRANCIA?
Además de la calidad de su formación, la École centrale Paris (ECP) promueve la inserción empresarial. Muchos formadores e interventores egresaron de allí. Muchos contenidos eran estudios de caso concretos. Pude realizar dos prácticas: una en PSA y la otra en el sector de empaques del grupo Pechiney que se convirtió en Albéa. Para resumir, mis estudios en Francia me brindaron un conocimiento preciso del mundo industrial y me permitieron ingresar a él fácilmente. Otra gran ventaja: en el campus de la ECP hay un 30% de alumnos internacionales lo que demuestra la apertura a otras culturas.
¿FUERON DETERMINANTES PARA SU CARRERA SUS ESTUDIOS EN FRANCIA?
Construí mi carrera profesional a partir de mi práctica de fin de estudios: trabajo hoy como Director de ventas y planeamiento de operaciones en Albéa Tubes Europe. Esta dinámica empresa me ofreció grandes oportunidades y experiencias internacionales muy enriquecedoras. En los últimos años efectué misiones en Brasil, en Indonesia, en México y en diferentes países de Europa.
¿QUÉ LE APORTA UNA DOBLE CULTURA EN LA VIDA PROFESIONAL?
La adquisición de una doble cultura va más allá de la absorción de las dos culturas en mención. Aporta una flexibilidad y una capacidad de adaptación fundamentales para una carrera internacional.